Retrato

Retrato

Conocí de un hombre que en su silencio, padecía los ruidos de la ciudad que lo amamantaba
Discurría entre gruñidos los parques y los autos,
Señalaba con su rostro los carteles,
Los tejados quebrados por la edad, la lluvia y los malos arquitectos.
Era un hombre pequeño porque quería parecer un caracol,
Una semilla de concreto caída de la mano de su hija.
Más que un ciudadano era un hombre-ciudad,
Eran sus pulmones los arboles de la Calzada,

Sus arrugas sobre los ojos, el suelo partido del Parque Central.
Conocía a un hombre que despierto soñaba con la ciudad que conocía;
Y sonreía cuando la lluvia corría desde los techos
Y las palomas compartían sus historias de viajes y turistas.
Era un hombre feliz,
¡Era yo feliz!
Cuando solo tenía que mirarme hacia dentro.