A quien madruga Dios le ayuda!!
Madrugué ... no sabía que ya el día me esperaba
Me esperaba como lobo en la ventana
y agarrada al sol naciente agazapada
la tormenta... la tormenta de sonrisa envenenada
un café a medio humo aún soplaba,
empapandome la lengua la empezaba
Ese día ya nació con pelo largo!!
C
el café que en su amenaza coronaba
ya las partes que en mi cuerpo le sirvieron,
como cauce.... en su rumbo hacia la vulva
que silente, recogió la ardiente lava
En mis labios la sonrisa ya era mueca!!
Y la taza que volando sin piloto
aterriza en el doblez de mi antebrazo
convirtiendo en cardenal, la simple peca,
buena suerte, esa taza era regalo de mi suegra
Como trasto que rodando pierde el norte
cada golpe en la escalera suelto lastre
el penúltimo escalón, pidió el molar
Ni siquiera la experiencia fue volar!!
Como puedo me levanto casi a gatas,
en el suelo espatarrada esta mi gafa
que faltando la patilla y el cristal,
se me cuelga de la oreja... me reclama
Para un rato demasiado sobresalto
¿si volvemos a la cama....?
Te prometo que ese día madrugué.
Conoce más del autor de "A quien madruga Dios le ayuda!!"