Otro canto mañanero

La aurora me sacó del Sofasutra
Tomando mis extremidades
Y halándolas, halándolas, ¡ah…!
Hasta reventarme las vértebras
Con su risa kirika ….kikirirí kokorikó….
¡Ay cómo duele florecer tan claro!
Amanecí con los ojos en la niebla,
Con cero kilómetros de combustible,
Lejos del mundo como de mí mismo,
Del cielo y su distangustioso abismo

Cercado por los mismísimos ángeles,
sodogonorreoides, perrorrastras, proxynetas,
¡Junkies de éter! ¡winomanes sin hambre!
¡Allez vous faire fff…ffff…!
Qué hondo es despertarse con aires de neonato,
Solo, sin los besos de la Guerrera,
Varado en un Sofasutra cuadrado
Distangustiadándose por la afasia, la inercia, la falaxia,
Más balumbo que un mapamundi roto,
¡Más muerto que pájaro idiota!