Olas de altamar (infamia)

Olas de altamar (infamia)

Ahora sé que hay una baraja de cielos y yo escojo mi carta
¡Que universos eyaculan realidades sin fin y yo salto dentro de uno y otro!
a veces me siento en primera fila del anfiteatro y brindo mi aplauso o mi desconsuelo,
Otras soy el actor que recibe las bombas molotov...
¡Y en ocasiones besos piadosos de helado de guanábana!

“Nataly” al final nuestra historia;
Fueron espolones tasajeando las carnes vivas en el palenque,

Resacas de injurias,
Colapsos de asteroides de víctimas y victimarios
Meandros del reproche, Recovecos de lágrimas de sal,
Aun que tu bello rostro siga golpeando con la culata mis cienes
Solo quiero olvidar la estampa de aquel estúpido que se quedo
Ondeando la bandera de la esperanza en el muelle de los: No retornos…
Y en vez de ser la cabra que ofrenda su sangre a cupido, soy el andante, Un ciego que se hace clarividente…
Aunque a la distancia de a pocos has ido perdiendo tus tintes de diosa
Y ahora más bien te asemejas a un cuadro que ha perdido plusvalía en el mercado de arte.

-Soy el peregrino que levanta su oración en un paramo
Hoy encontré unos ojos tapatíos, ahí es donde me desnudo y el arroyo donde lavo mi túnica
Ahí yace mi ser entre vientos de pureza, locura y delirio.
¡Mi niña linda! la que es mi confidente y ha comenzado a escuchar mis secretos obscuros,
La que invoca mis rasgueos y acordes nocturnos…
A La que he sentado sobre mí con sus piernas abiertas
Y he Recibido su alto voltaje como un rayo durante una lluvia con arcoíris
¡Gitana de luna! ¡Bendita tres veces! por tu tinta con que tatúas mis pupilas, por tu piel de agua,
Por ser Dulce y piadosa como un salmo…
¡Y te hago el amor cuando eres nieve!
¡Te beso cuando eres arena que el viento se lleva!
¡Y me dejas tenerte y penetrar en ti a deshoras sin revelarte!

“Nataly” Ya te arroje al fuego, al infierno más ruin y humillante que es el olvido…
Ya no soy más el del muelle ¡el navío navega en altamar!
Antes de acabar y a destono quisiera que sepas que en mi cielo hay Ángeles
Una fauna multicolor, y un arcoíris de odas precolombinas que se postran ante el altar del creador,
Pero… Pero… ¡Pero!
¡Tú dime! ¡A que dios inventado por la raza humana he de matar!