Nottingham Place Hotel

Nottingham Place Hotel

Llegue a tierra fuera de horarios, la nieve derretida pero aún se me escarchaban las palabras
Saque de mi asombro el papel amarillo con letras estrujadas y mi pedazo de buena suerte;
¡Había llegado!, parecía que era un continente solo para mí;
Era simplemente un hotel del centro,
Un bocado de armonía y modernidad mundana en una ciudad tan estirada;
Tenía ladrillos rojos y farolitos repletos de luciérnagas,
Era lo que mi cuerpo había esperado; no era un hotel cualquiera.
Me deje matar afuera la incredulidad y la falta de costumbre,

Me arrodille ante la posibilidad de una ducha caliente y la comodidad de un sillón.
¡Dormiré hoy!,
Mañana será otra la suerte de mis botas de cuero,
Y otra, -o quizás la misma-
La puerta que se abra y espere asombrada uno de mis besos ya olvidados.