No hay que esperar...
Nos levantamos en la penumbra de la noche
cuando el silencio hace su manifestación
y un sueño tenebroso hace a la mente jugadas insolentes
y sientes que formas parte del cuento.
Irónica realidad cuando los anhelos se te esconden
sucumbiendo lo mas profundo de tu alma
y una lagrima cae de aquellos nubarrones.
A lo lejos la luz se aproxima de una forma esquiva
que lastimo los susurros del amor.
Playa brisa y lago quien lo creería
en medio de una región muy escondida
donde labriegos incautos les sonríe la avaricia
generando problemas en la vía.
Ya el tiempo se aproxima
que debes ir muy precavida
y no ser tan permisiva.
Sombra que a lo lejos me llevas por los mares
a reencontrarme con mi poesía
y hacer feliz a quien no me lía.
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