"No dejo mis harapos a ningún desconocido"
Este sótano hostil
hospeda a las penas.
Habitación con aroma a rancio
dónde columpian las emociones.
Mohina vos se interrumpe
al despliegue de la mediocre existencia.
Suben los versos a la azotea
dónde ensayan el papel inaudito
de la felicidad.
C
las emociones pasajeras.
Y sin permiso deambulan
los fantasmas del pasado,
qué no duermen...
La soledad como estoica
se volvió amigable.
Volatilizando a la realidad cruel.
No me permite ser una vagabunda
emocional.
Dejando mis harapos a desconocidos.
Tengo el permiso ganado,
licencia para curar
mi derrotero desamor.
Y salir airosa de la emboscada,
que me puse yo misma.
Veo modificado el ADN
Ese gen que me desalentaba.
Puedo sentir el placer por la vida,
Y crear un nuevo ensayo
con connotaciones diferentes.
El amor es el tema que apareció sin preámbulos
Y se atreverá a vivir sin culpas.
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