nidos de mantequilla

El alma reside en la gloria propia del entendimiento
Si entiendo que no me redime sublevaciones de afanes estúpidos.
Con la experiencia de los que perdonan voy
Porque antes me he perdonado.

Todavía subsiste el polvo que se me pega a los zapatos
Y aunque brinque y saltes no sale, no se despega...
Sanar es regar el desierto y hacer florecer dentro.
La fuerza poderosa de creer y crecer.

E

n el manto blanco de su tumba
El dejo justicia sin altivez.
?hay pedazos de su fuerza en mí y en todos?.
Proteger su voz y sin zapatos que se peguen a la tierra
Porque esto es solo un refugio. Un envase que alguna vez se esparcirá
Y Veremos el amor cara a cara
Y no será humano con humano
Será ante la sala absoluta de lo que hemos concebido antes.

Si hablo de Dios, tendría que lavar los pies a cada ser
Si hablo del hombre veo sus impetuosos muros impenetrables.
Pero también veo algunos nidos suaves como mantequilla
Allí en esos nidos me cobijo.
andaré descalza esa soy.