MUJER, Y NADA MÁS
Nieva en mi corazón, arde mi sangre, se eriza mi piel, mi metabolismo conjuga y amalgama esas temperaturas, desatando en mi imaginación, Firmamentos a transitar, en pos de coronar en realidad terrenal, todo aquello bello, que el destino reserva a sus seres amantes, a manos llenas, para gozo, satisfacción, deleite, contención, apoyo, y soporte.
Mi Pequeña Criatura, ven, abiertos de par en par, mis brazos esperan tu arribo para acercarte a mi pecho, compartir contigo el golpeteo de mi corazón, y recibirte en mis labios con un beso inmortal, que selle tu bienvenida a mi lado, los capullos en flor de mi inminente Primavera, serán el escenario donde tu brilles con luz propia, emanando tu aroma, embriagando mi aire, en ese cuadro Pasional, inundado de Amor y afecto, a nuestras vidas.
PLATINO
Conoce más del autor de "MUJER, Y NADA MÁS"