MICROPOEMA NÚMERO 41 (EL CUERVO, EL PEQUEÑO CUERVO)
MICROPOEMA NÚMERO 41
EL CUERVO, EL PEQUEÑO CUERVO
El cuervo, el pequeño cuervo, se puso a comer fruta en un jardín. En ese jardín había una fruta que era como un manjar para él, como un suculento manjar para el cuervo. Y el cuervo se pasó largo rato comiendo la fruta que era un cambur, un cambur no muy nuevo. Ese cuervo era negro como un azabache, como una noche sin luna, como un carbón. Y luego de que el cuervo, el pequeño cuervo, terminó de comer el cambur, entonces se puso a buscar el agua, la tan preciada agua, el vital líquido, como muchos le dicen al H2O. Y consiguió el agua en un charco que había algo cerca y se puso a tomar el agua con una sed como pocas, una sed que le debe dar a muchos cuervos a muchas horas. Y luego el cuervo, el pequeño cuervo, emprendió el vuelo hacia algún árbol, uno de tantos árboles, un árbol sin muchas hojas.
Ibrahim Fajardo
21 de Octubre de 2021 (Copyright)
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