A mi soledad

Soledad, que a veces me acompañas
amiga indiscutible,arcano de la vida
escándalo frustrado, apaciguadora y ambigua
déjeme pedirle, acompáñeme en mi alba.

Buena o mala consejera, es atrevida,
sugestiva y permisiva; permites el olvido
laurel de los años humano aledaño
aflicción que pretendes excusar con los años.

H

abitas en mi alma, no sé que me aguardas
no entiendo que pretendes, no sé de que halagas
bloque de inseguros,llantos que prometes.

Quieres que termine con mi alma,lo que no sabes
es que mi alma te aguarda,espero no te vayas,
no me excuses del épico, excúsame del hado.

-Miguel Rincon