Me preguntas si te quiero.

Era un martes como cualquier otro, las nubes ocultándose, el caramelo en la punta y el veneno en la luna, con tu voz dulce apuñalaste a mi alma con tu pregunta... ¿me quieres?
Sinceramente no sabía de qué manera responder, no sé exactamente como te quiero, no si te quiero tanto o más que respirar, no sé si te quiero como el sol a la luna, o como un ave a volar, no sé si te quiero, como quien quiere de verdad, no sé si te quiero, tanto o más, como a el viento le gusta bailar con tu cabello, no sé, a veces siento que no es que te quiero, sino, que quererte es lo único que hago al respirar, o tal vez sea que quiero al aire que entra en mis pulmones, para poder decirte "te quiero".

¿Cómo me preguntas si te quiero?, si con cada respiro tuyo se me detiene el corazón.

Cada vez que el aire sale de mis pulmones es para regalarte un suspiro
Si cada vez que camino, lo hago esperando a que mis pasos me lleven a ti.

¿Cómo me preguntas si te quiero?, si en verdad no sé cómo llamar a esto que aún no se puede definir con palabras.

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�Cómo me pides que te diga algo que mi corazón no ha comenzado a sentir pero ya sabe que su destino es hacerlo?
¿Cómo lo haces?, ¿Porque te atreves?, es que acaso ¿me quieres volver loco?, bueno, no creo que se pueda más.

Me preguntas si te quiero y lo hago de la única manera que se, con palabras salidas desde las fosas más profundas del mar de mis recuerdos, de las montañas más altas de mi imaginación, de los confines del laberinto de mi alma, de las estepas de mi corazón.
No hace falta que lo menciones, si, si te quiero, y lo hago como nunca lo hice y como nunca lo hare, te quiero y gracias por dejarme decirlo, te quiero y es lo único, que se hacer.

Los sueños son los que nos hacen, y tú eres mis sueños, así que, se podría decir que estoy hecho de ti.