LA ROSA DE NUESTRO AMOR

Como la última rosa que me regalaste…que se niega a morir, así mi amor por ti resiste a rendirse… ésa rosa que hasta mi llevaste con todo tu amor…me dice cada día que tú estás ahí, que sigues esperando un sí por respuesta…que aun manifiestas tu inconmensurable deseo de entregarme un amor que nos unirá por siempre… ese amor que llevamos en cada poro de nuestra piel…que sentimos aunque no estemos cerca…que nos hace olvidar del tiempo y del mundo entero cuando estamos a solas…que nos hace viajar en un instante al cielo y al infierno al tiempo…que nos hace sentir libertad, pero a la vez nos encadena en un sin número de sensaciones, que nos ata al otro sin restricciones…un mundo en el que podemos ser como queremos, sin inconveniente alguno porque así somos y nos amamos por serlo…porque no existen límites, porque tu vida empieza donde termina mi locura, porque tu locura termina entre mis brazos…termina? qué digo termina, termina volviéndose en una cuerda locura que me une a ti para ser uno solo en nuestro pensamiento, en nuestra alma, en nuestro cuerpo, en nuestro lecho… porque finalmente es allí donde nacemos, donde sentimos, donde vivimos el más hermoso de los amores…porque no es sólo sexo…es amor, amor del bueno, es amor real, es amor sin restricciones y sin guardarse de entregarlo todo…todo, todo cuanto tenemos dentro…nuestro miedos, nuestras pasiones, nuestros anhelos, nuestros sueños…todo…la vida entera a los pies del otro porque el otro, al entregarse por completo es el complemento perfecto…