En descanso
...
No puedo cansarme de esperar
porque no puedo cansarme de mirarte
pensar en ti siempre fue quedarse
aplastar el viento con la huella
por eso es que te hallo en cada esquina
en el sudario de la memoria
en una esquela temprana de victoria contigo
n
ni arroparte de mí espejo,
porque es un simple breve el día
invisible perla de polvo
si yo tuviera que esperarte
sediento en inmóvil
capaz y seguimiento de deuda, veo la estación tras mío
a una ciudad donde estás tú
en esa calle en que si estoy tú no estás
que besarías a todos, menos a mí
que te acostarías con cualquiera menos conmigo
que ni siquiera me escribirías una carta
el beso está en desuso
por la apanadura del tiempo y de ese lugar:
la flor se gasta a sí misma
y la manilla del sol
aplastan por si solas a las hormigas.
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