Dador de Fuego. (Poesía Gótica.)
Vertedero ardiente, extendido en seda púrpura
enredadera te envuelve del cuello y se estruja tatuando con sus talones, tu espalda.
Arremete firme y alzado,
lascivo danzante en diverso ritmo durante el trayecto por todo el húmedo y estrecho túnel donde queda atrapado
Dialecto en gemido sangrante y obsceno, nudo apretado no disuelto
Alguien viene, ya viene desde ti, espíritu jadeante dador de vida! ,
a
Muerde al tiempo la exhuberancia y redondez de éstos que son volcán enorme y desbordado de lava
y al toque de llama se endurecen, se inflaman sin guardarse nada porque no saben callar.
Queda enclaustrado en túnel estrecho.
Tanta opresión dejó al firme guerrero, seco de ríos...
Descansemos el vientre y la llama
Descansemos bebiendo el sudor de nuestra lava.
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