Cruces.

Hay donde los caminos se cruzan
Donde las miserias se desvanecen
Y los llantos no son más que ecos.

Donde las miradas van cediendo
Y los cansados labios no son más,
Caen gotas de humana lluvia en la tierra triste.

El respirar de seres que anhelan,
Y el trinar de las aves se oirán…

Regresarás nuevamente y conseguirás…
Viejas cruces donde sacrificaste tantas cosas
La corona espinada como un trofeo te espera
La risa volverá a fluir y ya no estarás solo.

Vaya este humilde homenaje a millones de seres humanos que se tuvieron que marchar lejos de sus patrias, llevando consigo el corazón cargado de sueños y esperanzas, muchos regresaran al encuentro con sus iguales, pero otros se quedaron en viejos cruces de caminos donde los llevaron sus pasos, un réquiem para otros que quedaran sembrados en tierras extrañas, pero jamás ajenas, pues el mundo es de todos y no de unos pocos.

Lexur.