Colina
“A thing of beauty is a joy for ever”
John Keats
Lloran los matorrales contra el suelo
y reciben la escarcha de la aurora,
entumecidos, ebrios.
Azrael se tiende sobre la hierba,
molusco que se pega a las cuadernas del navío,
enmaraña el absurdo con mórbida insistencia,
con impotente y tímido deseo.
el tibio belfo parte en dos el espejo del agua,
riza en ondas la superficie.
Hermoso Satán vestido de cuero rojizo,
desbocada, galopa entre fresnos cuyas ramas
extendidas son trampas mortales;
crines ondulantes al baño de la luna,
atraviesa el vado entre nubes de chispas
que sacan a los guijarros las herraduras.
Ensancha los ollares un hálito de ozono
inhala la noche veraniega en su loca carrera,
estremecimiento violento, huracán, jadeo,
arpegio evanescente bajo el humano peso.
Tiene recuerdos del primer picadero:
serreta de hierro, cincha y baticola,
fusta y espuelas ensombrecen sus sueños.
De la noche la hubiera rescatado Maldoror
pero todos somos esclavos, desechos.
A su lomo, ebrio de instantes y galopes,
Azrael no puede hacer nada contra el tiempo.
La yegua es, Whitman, camarada de fatigas,
galopa en mis poemas, encarna la poesía.
Mi mente la asocia con nostalgias de otros días,
que tocan como caricias, como salpicaduras.
(de "Poemas malditos")
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