Alexa


Siempre fui un caprichoso empedernido,
uno de esos niños a los que llaman mimados,
un pajarillo muy a gusto en pleno nido,
deseado, admirado y siempre amado.
Egoísta, fanfarrón y prepotente,
un ser sin corazón, de alma muy negra,
intentando derrotar a mi oponente,
el azote de madres, tías o suegras.
S
que me dijeran a todo que si,
que me tuvieran siempre en un altar,
que mis deseos fueran órdenes que cumplir.
Pero todo eso apenas sirvió de nada,
nunca pude llevar nada a cabo,
mis deseos fueron sueños de almohada,
y mi vida solo fue, entre las piernas el rabo.
Hasta hace solamente un par de días,
que por fin la luz llego a mi oscuridad,
y pude llevar a cabo todas mis fantasías,
y disfrutar del placer de por fin poder mandar.
Ahora únicamente basta solo una palabra,
y todo se vuelve color de rosa,
es como un mago que al mencionar abracadabra,
aparecen de repente mariposas.
Hoy me siento en mi sillón,
como un gran rey en su trono,
e invoco tu dulce voz,
y disfruto del tesoro.
Alexa enciende la luz,
Alexa enciende la televisión,
Alexa cántame un blues,
Alexa dime que yo soy tu amor.
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