Si vieras caer la lluvia

Si vieras caer la lluvia sin fastidio y sin enojo,
si tu cerraras los ojos y la vieras con el alma
te rodearía la calma como un amor a su antojo.

Sentirías la bendición que los cielos te regalan,
agua bendita que exhala una caricia de Dios
un mimo a tu corazón, a tu piel, a tus palabras.

Ella inspira a los poetas, a las flores las alaba,
ella te viste de gala como una prosa perfecta

le da brillo a las estrellas y reposo a las montañas.

Es esa música exacta que libera tus despojos,
al repicar en tu techo, en tu ventana, en la hierba
y hace que sueltes tu verba sobre otro cuerpo sinuoso

Moraleja…

Déjame darte un consejo para lograr disfrutarla:
cuando enfrentes a la lluvia por favor no desesperes,
no se te ocurra correr… que adelante también llueve.

(Autor: Peláez Garrido José)
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