¿Recuerdas?

¿Recuerdas mi querida vieja?

¿Recuerdas cuando nos conocimos en aquel colorido sube y baja?
los muchos juegos absurdos que yo creaba,
las muchas veces que llorabas cuando yo ganaba
y las muchas veces que alardeabas cuando yo lloraba.

¿Recuerdas cuando fue nuestro primer beso?
la pasión que sentimos cuando éramos jóvenes,
empañando cada ventana de nuestra cómoda casa

por el calor más puro que existe en nuestra alma.

¿Recuerdas cuando yo te pedí la mano?
el hermoso vestido blanco que llevabas,
tu tímida sonrisa por la frase esperada
y aquel dulce beso de cuento de hadas.

¿Recuerdas cuando nació el travieso de Pablito?
y luego llego la tímida de Claudita,
al barbudo quiltro juguetón que tuvimos
y aquella pequeña y acogedora morada.

¿Recuerdas cuando los niños se volvieron adultos?
un fuerte sentimiento de tristeza y orgullo,
las grandes paredes silenciosas y olvidadas...
aquel pequeño sillón en el que nos sentábamos juntos.

¿Recuerdas mi querida vieja?

Ahora puede que ya no me escuches,
pues, tu sueño es profundo y agotador.
Yo también estoy cansado,
y mis parpados están muy pesados...

Quiero que seas lo último que mire...
plasmar tu arrugado rostro en mi pupila
para poder conocerte una vez más...
en aquel colorido sube y baja.