¿Quién verá?
¿Quién verá mi ser,
Así como lo ve
El ojo enamorado?
Convertirá mis fallos
En aciertos lejanos,
Pero por llegar.
Mis aristas y flaquezas
En soporte y posibilidad.
¿En la mente de quién,
Cuando la noche arañe
Y el sueño acompañe,
Me apagaré?
¿En qué praderas mentales
Orbitará mi recuerdo permanente,
Sempiterno y latente, esquivo y furtivo,
Respuesta primaria, reflejo primitivo?
¿Dónde primaré sobre respirar,
Cuando el alba despunte
Y un nuevo día se barrunte
En el empañado ventanal?
¿Vibrarán tus labios
Como las piernas de un profeta
Cuando interpreta una señal?
¿Se acelerará tu pulso,
Como un telégrafo nervioso
Que brinca sin parar?
¿Buscarás mi mano,
A la mínima oportunidad,
Un conato de roce, casi posiblidad?
¿Me encontrarás entre el ruido,
Que atrone la habitación,
Como un río encuentra al mar,
Incluso cuando no lo buscó?
¿Añorarás mis impertinencias,
Si solo existo en tu consciencia
Y tienes que rebobinar con paciencia
Para no olvidar como era mi voz?
¿Dudaras del sol
Y de su inabarcable fuerza
Si no es mi calor el que besa
La silueta que mi forma deja en el colchón?
¿Quién soy yo,
Para exigir tales menesteres?
Mejor marchar a dormir.
¿Quién me creo,
Para considerar tales placeres,
Como algo que siquiera puedo asir?
¿Quién verá mi ser,
Así como lo ve,
El ojo enamorado.
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