Para mi amado gorila viejo, feo y fastidioso

En un rincón de mi alma
guardaré tu recuerdo eternamente,
y buscaré con afán tu voz, tu risa,
cuando las horas tristes me acompañen…
sé de tu pasado, de tus glorias,
porque las voces del pueblo las resaltan…
comprometiste tu vida en tus ideas,
en tus propósitos firmes, en tus amores.
Poco tiempo queda ya por disfrutarte…
me dolerá profundamente tu partida,

pero tendré presente siempre tus consejos,
tu hermosa disposición hacia tu nieta…
me reiré de ti cuando recuerde,
la manera graciosa de tu trato…
y lloraré, lloraré tristemente
cuando no estés para adorarme.

Prometo amarte hasta mi muerte…