Los hombres sí lloran

Desde niño entendí que las lágrimas no nos mojan el rostro pero si nos inundan el alma, que llorar no era cosa de hombres sino tertulia de damas , que los hombres no lloran me decía mi abuela y recalcaba mi mama, que mi raza era fina y que no permitía maricadas de niña, que las penas se ahogaban con botellas de guaro y canciones de machos, pero en este momento todo eso no importa pues la herida es tan grande que torrentes salados me destruyen el alma , lloro como un niño pequeño que se encuentra perdido , lloro como aquella mañana que viviendo, en montañas de Antioquia con mi padre a mi lado observamos perplejos a su buen mayordomo reventado a balazos ,lloro al saberme impotente pues mi padre postrado ya carece de alientos , lloro sin pensar en mi abuela e importándome poco si parezco una nena, lloro con mi fe vuelta mierda y con rabia infinita , lloro al mirar la injusticia que le embarga a mi viejo, lloro resguardado tan solo por mis viejos recuerdos que me gritan a voces que si mi padre me falta ya no habrá mas motivos ni esperanza ninguna.

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