LA MEJOR MUJER DEL MUNDO.

Las flores lloran de envidia
Al apreciar tu belleza,
La nieve se hace tibia,
Se hace buena la maleza,
Mi corazón se adormece
Al embriagarse en tu lluvia
De te quieros y ternura,
Mis manos que no descansan
Contorneando tu cintura,
Mi sonrisa ya no es mía,

Mi mente también es tuya,
Los ojos con que veía
Se aferran a tu figura.
Con pensamientos fecundo,
La idea que te hace pura
Y al astro que me dio un día,
LA MEJOR MUJER DEL MUNDO.