En mis silencios

En mis silencios
inmóvil, a la aguda flecha
que desata el lenguaje oculto
al goce de un soneto.
Mientras la noche duerme
ante la idea de lo infinito,
emerge su musa
del pecho de un rio caudaloso.
R
a la proximidad
de un volcán de cumbres;
inmersa conquista de fiel caricia,
en sus manos sobre mi talle.
Entre las columnas;
desde los sepulcros
olvidados por las zarzas,
nace el agudo sabor
de labios como el vino.
Cautivada por encantos
de calma y desenfreno;
entre acordes,
sumergidos a la claridad
de vuestro nombre en esplendor.
Prisionera
de una métrica armonía
a la magnitud de mis alcances,
entre ruinas
de una lagrima fugitiva.
Que el piadoso manto del olvido
sepulte la ausencia, en la enredadera
y entre velos rimen sus hilos,
para rescatar al adiós en el tiempo;
posado sobre la llama
para dar por fin, conmigo.
Gabriela Ponce LS

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