Diez Mil Evas

Bajo esos labios carmesí
llevas un poder inquebrantable
tu luz da vida
ilumina la sombra
brillas

Una fuerza aturdidora
esconde la suavidad de tus manos
no eres frágil ni temerosa
ni ninfa ni hada

No eres culpable del fruto prohibido
menos responsable de la expulsión de paraíso
Que viajen esos pensamientos arcaicos
en viejos vagones vacíos

Olvida la vergüenza por tus curvas
Tira al abismo las comparaciones
Abraza tu figura
Desmorona prejuicios y estereotipos

Tu ser es potencia pura
Dueña de deseos y pensamientos propios
Puedes hacer lo que te nazca
Usar tacones o andar descalza

No vales por el amor de otro
No le perteneces a nadie
Eres tú...
Tuya.

Karla María