Como (no) reparar un corazón

Oyes el sonido
de su corazón
al romperse,
partirse,
despedazarse.
(¿Culpa tuya?)
No te queda más remedio que repararlo.

Pegar trocito a trocito
(con disculpas

y regalos de arrepentimiento)
lleva demasiado tiempo,
¿verdad?
no encontrarías todas las partes,
no quedaría igual.

Fundir (a besos)
unas con otras
todas las partes tampoco resultaría,
todos sabemos que el cariño repentino, el amor a contrarreloj,
se enfría rápido,
y quedarían vacíos,
que ya no se podrían rellenar.

Puedes optar a unirlo,
como las piezas de un puzle,
(con tu extraordinaria y calculadora mente)
pero todos sabemos que el amor
es un rompecabezas demasiado complicado.
(Incluso para ti, que no dejas
que tus sentimientos
entren en juego)

Lo podrías sustituir por uno nuevo,
dibujar un corazón grande y rojo,
cariñoso,
fuerte,
independiente,
pero que a la vez dependa de ti.
Un corazón perfecto.
Pero tampoco vale,
sería un amor falso,
fingido,
impuesto.
Y tú no quieres eso. (¿O sí?)

¿Qué vas a hacer, entonces?
Sea lo que sea,
que hazlo deprisa
(aunque con paciencia)
porque se acercan
otras manos más expertas
en como (no) reparar un corazón.