Pretendiendo ser dos
Danzando entre dos paredes,
yo detrás y tú al frente,
como si fuésemos parte de la misma sinfonía.
Tus labios que no son míos,
pero que expresan lo contrario al rozar la finura de mis dedos.
Mi espalda, ya cansada
de la misma posición.
Intenté ponerme de puntillas,
para estar más cerca tuyo.
respiramos al unísono,
Y susurraste:
"No te alejes",
y sentí un ardor en mi mejilla.
Tres o más besos faltaron,
para que me cargaras contra la pared
y la estatura de mi pequeño cuerpo ya no importara.
Me regalaste tu aliento recién besado,
y decidí mirarte a los ojos.
Te tomé de la mano
y ya era imposible soltarnos.
Ahora éramos dos intentando ser uno,
jugando a romper esquemas.
Mi boca en tu piel,
tu tacto en mi cara,
otro movimiento más y ya estaba fuera de base.
Y entonces, cuando menos imaginaba:
perdimos el control.
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