EPÍSTOLA II

2017 Ago 27
Poema Escrito por
María Ángel Russo

La sangre está muy despierta: el río recorre mis venas con fuerza.

Quiero estar abrazada a ti, carajo, en la misma cama, desnudos y penetrados. Quiero sentirte a plenitud, emergiendo monolíticamente desde el centro de mi ser...

Ahora mismo estoy despojada, sintiendo el aire fresco de la mañana entrar a mi habitación para envolver mi desnudez mientras escribo... Y mientras escribo tu imagen desconocida viene a mi para amarme. Estás abrazado, tan desnudo y abierto como yo, contemplando la ilimitada extensión de este océano azul en el que estamos sumergidos, descubriendo por una vez, la verdadera belleza de los cuerpos, el profundo lenguaje de la piel.... ¡Escucha, mi amor! ¡Cuántas cosas se dicen! Cuánto calor se transmiten; ¡qué melodía intensa entonan con sus voces, nacidas en lo inmemorial...! ¡Escucha!

Somos parte de un concierto cósmico: cada molécula del universo es parte de nosotros y nosotros somos una molécula del cuerpo de Dios, entonando el mismo canto de vida... ¡Sintamos, por una vez, cuán unidos estamos a la Creación!

Éxtasis...

E

n un universo tan puro, blanco y azul, donde la luz todo lo penetra estamos nosotros, suspendidos, penetrados, disueltos en la unidad magnifica que sólo el amor puede concebir. En la pureza solar de este universo no pueden existir sombras...

El potro sigue encabritado...

Galopa por las sabanas del deseo, abierto como el día, sacudiendo las crines vigorosamente, haciéndolo hermoso a mis ojos: ¡esta es la belleza que me habita!

2017 Ago 27

María Ángel Russo
Desde 2017 Jul 03

Conoce más del autor de "EPÍSTOLA II"

Descubre más poemas de nuestros autores