Claro obscuro
Llenados los alvéolos,
se respira el polen que anuncia
la temprana estación de primavera,
entre fragmentos de lluvia escasa.
El ropaje se cubre de un aire tibio
mecido entre las copas
anidado sobre la flor de tarco.
Y al fondo el murmullo del grillo
a través del añil crepuscular.
Signos atravesando la noche del fuego
ascendiendo a las memorias de un alud;
bajo el cielo claro obscuro.
La vigilia es un sueño de eternidad,
sosteniendo los acordes que albergan
la simetría eclipsada sobre el escenario.
Bajo un velo, la interna aljaba
en su incendio ceremonial;
se cubre de entre los espíritus cautivos,
ensamblada la estación del polvo sólido.
La tinta de lunas bóveda de retablos
donde se acuna la tesitura saturada,
del golpe de percusión latente
trovador de luminiscencia y obscuridad.
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Marzo 16, 2021
© 2021 La Dama Azul, Gabriela Ponce de León. Todos los derechos reservados.
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