Cada noche

Cada noche en mi habitación dejo la ventana abierta
deseando que cualquier día tú entres por ella
y así puedas acostarte a mi lado
en ese hueco que desde que te conocí te he dejado
pero con cuidado
no vayas a despertarme
y contigo este soñando en ese instante
cuando en mis sueños no hago más que recordarte
con esa sonrisa tan viva que en tu boca yace
tan dulce como el agua que del manantial nace

ojalá desde ese día poder compartir cada momento
y juntos poder guardar todos los recuerdos
que poco a poco iremos viviendo
aunque hoy, un día más, dejaré la ventana abierta
esperando a que algún día, tú cenicienta, entres por ella.