Non era un sogno

La utopía de un túnel riel
que atraviesa el noble bosque
entre copiosas hojas cetrinas bañadas de claridad,
cuál pasadizo natural;
un presente del orbe…

Anhelo fulgurado de dones,
permitiendo imitar al trino ruiseñor
en su canto divo ruta,
viajero pureza del firmamento.

A

cudida búsqueda en calma,
que ofrendare un brote dócil
elevado en la semilla germinada,
y el obsequio aroma de estelas
sobre un jazmín recién sesgado.

Una aspiración de paz
que brindan los litorales altas olas;
lo mismo, que se adentra envuelta la claridad alborada,
de una tibieza de montaña.

¡Ambición del resplandor hálito lozano
interno en el aura faz del mundo!
y pétalos fuente de verdades
perenes, dentro del eco de prados.

Inclinación abrasador deseo
de hojas roble esmeralda;
y cada abrid de proa,
extendidas alas en la escena.

Persevero en el rumbo
de la viña y el sabor de racimos,
cubiertas por torres estrellas;
que iluminen las perlas proyectadas
en cada cristalino que observa el aura de los vivos.

Pretender la libertad
del alma y su plumaje,
laúd manantial la palabra consumida
al color del arce tinta heredera.

Aguardo impaciente
en andar de suaves pasos
y una cúspide derretida por estrechas lágrimas sanando al espíritu
como un rayo estático más allá de mi ventana;
indicio de una nueva era.

Espero el embeleso del basalto
y el misterio del acto intimo
hacia un rostro en el crepúsculo.

Un cristal transparente nácar marino
paisaje interior.

…Y la meta
¡Más grande que el lenguaje
asomado sobre trazos escritos en papel Dalí.!
*

-Escribo para mí y para todo lo que vive en ti-
Marzo 21, 2017
Autor: Gabriela Ponce de León
-La Dama Azul-
© Derechos de autor