los colores de mis pétalos

yo no tengo deseos de mantener pétalos que perfumaron visiones
las huellas de la tierra mojada se marean en la monotonía
y el perfume ya no agrada a la piel
nada queda de pétalos penetrantes, nada queda ya de las aventuras que narran los sentidos de asombro de tus días
yo solo te ofrezco mis espinas lamentadas de derramar sangre azteca y diluir las huellas de andares
ofrezco mi vista cansada y mi hambrienta ambición
ya nada queda de la rosa fresca que llamó tu atención
sólo mis profundas raíces que atraviesan la historia de la humanidad