INFANCIA

Mis juguetes favoritos eran aquellos que podían recorrer millas, aquellos donde el publico enloquecía con la velocidad de aquel motor.
Los gritos eran mi mayor motivación para seguir recorriendo la carretera llena de competidores bastantes buenos.
"Se el mejor, pero no te creas el mejor".
Mi padre me mencionaba eso todo el tiempo, mantenía la concentración al brote de mi pulsación.
Y es que en un abrir y cerrar de ojos, conducía los lugares favoritos de mi madre, conducía a la universidad, tomaba tiempo libre para conocer la ciudad.
Mientras mas pasa el tiempo, el publico se cansa de lo mismo, necesitaba un plan, una estrategia para atraer mas gente.
Mi estancia en aquel volante no era en lo que podía permanecer durante mi vida.
Logre llegar a la meta, no fui el numero uno, pero si el mejor para mi mismo, para mi familia, para todos mis seres queridos.
Ahora el volante ha pasado a manos de mi legitimo, ahora soy parte del publico que lo apoya, no importa que tanto tarde en llegar a la meta, yo permaneceré ahi.
Estare en la banca de atras esperando que llegue con el brillo en sus ojos y esa sonrisa de victoria.