El perfume de la vida

He llevado tantas cargas, que ya no siento mis pasos.
Me eche tantas culpas, que ya no culpo a nadie.
He caído tantas veces, que solo miro hacia arriba.
Caído di tanta leña, que el fuego no me quema.
Derrame tantas lagrimas, que se inundaron los ríos.
Deje caer tantas flores, que ya no siento su perfume

Con los ojos secos noté...
Que las cargas hacían mas fuerte mi espalda.
Que mis culpas alivianan el paso de los otros.

Que mirando hacia arriba podía saltar mas alto.
Que las cenizas no quemaban la raíz.
Que los ríos inundados esparcían mas semillas.
Que el perfume que no sentía impregnaba a los demás.

Porque...
Si no llevo peso no puedo afirmarme.
Sin la carga de mis culpas otros se afirman por mi.
Solo mirando hacia arriba veo la luz del sol.
De la raíz vendrán nuevas ramas.
Cuanto mas semillas haya mas flores nacerán.
Y, aunque no lo sienta...
el perfume me impregna a mi...