VIVE

Quizás es tiempo de que vueles, de que busques en tu interior lo verdadero, lo infinito, ese camino infinito que veo en tu mirada cada vez que en ella me pierdo. El brillo de tus ojos y un sin fin de alegrías...
Todo es blanco, luces amarillas, pasos de andar libre y ruidoso, enamorado de la vida, del amor, y de un fruto que no se perderá ni siquiera en mil inviernos.
Vuela amor mío...
Mi amor cobarde no se atreve a pertenecer a la libertad de tu sombra, y al infinito de tu mirada.
Siento una esperanza, como un sueño, arrastrar hojas secas, escuchar el agua correr, viendo tu sonrisa y pensamientos partir, lejos para vivir, abrazando un sueño, un fruto y esa taza de café.