CONFESIONES O CUANDO SE HABLA DESDE LA CONCIENCIA: Epistolas entre policías

poema de JINN

Caracas 23 de mayo del 2019

A quién te pueda interesar.
Estimado hermano, hoy te escribo sin conocerte, pero te hablo a ti, quiero contarte un poco de mi para que seas tú quién haga llegar este mensaje. Fui como tú y soy como serás pero mejor que yo. Este es una historia para mi heredero que podrías ser tú, es un intento de un padre de ser sincero, si crees que no es para ti has que llegue a mis hijos.
No es cosa sencilla sentarse frente a uno mismo con la mayor sinceridad y dirigirse a un perfecto desconocido para contarle mi realidad mas cruda. Hace tiempo cuando ingresé al cuerpo era una persona inmadura pero con valores que me permitían respetar por igual a cualquier persona, durante mi de-formación y sin darme cuenta fui perdiendo mucho de mi y ganando mucho de un nuevo yo que pensaba que era mejor, disfruté del poder, que poco a poco aprendí a hacer mío.
Ser policía no era lo que pensaba, pero entendí que alguien debía castigar y ser el malo era un precio aceptable para que la sociedad estuviera feliz. Mi formación me permitió tener la suficiente debilidad moral como para voluntariamente cegarme, ver sólo lo que me convenía para poder seguir y no lo que debía ver para ser justo y más humano.
Aceptar la corrupción, el abuso hacia los otros la humillación hacia los débiles y hasta el asesinato se hizo cada día más fácil y la justificación mejoró su argumentó con el tiempo, y en la misma medida ignore el abuso, la corrupción y la humillación que me hacia los superiores, la institución, los ricos y los politiqueros.
Simplemente me deje llevar y acepte que ese era el orden natural de las cosas, deje someter mi voluntad, que fue en otra época ejemplo para los demás y en poco tiempo me perdí dentro de un sistema que tarde diez años en entender, simplemente me deje llevar ignorando mi capacidad de luchar por lo justo y de ser libre (cosa que antes enseñaba), cuando creía ayudar a otros que eran víctimas y con mano firmé castigaba al victimario era incapaz de darme cuenta que me convertía en victimario también.
Igual de ciego fui cuando por el interés personal despojaba a alguien de sus pertenencias ganadas con grandes sacrificios maneras muy variadas y por medio de múltiples artimañas y me convertía en lo que juré combatir, nuevamente justificarme fue fácil, las circunstancias me obligan, “el sueldo es poco, la justicia corrupta y lo que yo no acepte lo aceptará otro que se beneficiará de lo que yo deje pasar”, todo esto sin darme cuenta de la miseria humana en que me sumergía, me creí especial y por encima de cualquiera por pertenecer a la elite de quienes repartíamos justicia, los de negro, yo podía hacer lo que nadie más podía, no tener sentimientos, ser sangre fría, pues era un comando.
La ilusión de que por medio de mi individualidad podría cumplir mi sueño americano, me enamoró y no importara como, habría de lograrlo. Hoy no celebró mi cumpleaños, pues en mi primer año de proteger y servir, justo en esa fecha, experimente que se siente que una persona muera por tú mano, el poder divino de decidir sobre la vida de otro, hasta llegué a pensar que se lo merecía y que era justa mi actuación, lo que nunca supe ver es que justo ese día mate mi humanidad y acelere mi cercanía con lo peor que puede venir de una persona, en la medida que me alejada de estar vivo. El aplauso de mis compañeros y su aparente respeto, junto al reconocimiento de los jefes me permitió ignorar el rostro de la muerte y me sentí especialmente por encima de los otros, pero siempre fue un engaño, la mirada de cada uno de ellos me acompaña, en los ojos de los niños veo la ausencia de un padre, en los de las mujeres veo el amor perdido, en el de las ancianas el vacío de un hijo, pero frente al espejo, en mis ojos no veo nada, son los ojos inanimados de un cadáver. Aún no he perdido la cordura, difícil de creer pero aún no.
Desde ese día la vida perdió el sabor que pudo tener antes de mi vida policial, no tenía importancia alguna arrepentirme pues nada cambiaría y me esforzaba en convencerme de que ese era el trabajo. Lo que en otro tiempo me pareció deseable se convirtió simplemente en una simple baratija, ante la fragilidad de la vida humana y su desvalorización todo perdió el color y acepte que nada podía hacer para dar marcha atrás, deje de sentir todo, los besos de una mujer nada eran, el abrazo de mi madre ya no tenía el calor que en algún momento de mi niñez, mi vida quedo sin sentido, vivir como un zombi, una cosa que se mueve y parece tener figura humana ha sido el sentimiento más abrumador.
Vi morir compañeros, a manos de “delincuentes” y de policías también, en el primer velorio llore, con la madre, con los hijos del amigo ausente, ya al tercero las lagrimas eran simplemente notas al pie de pagina de un deshumanizado, estaba seco. Nació en mi un gran odio por la humanidad, como era posible que alguien fuese capas de matar a alguien por la espalda a un policía, quien tan desalmado podría, luego con horror descubrí que fue otro policía del mismo cuerpo bajo las ordenes de un director, ese odio ambulante en el que me convertí, me dio fuerzas para cavar más profunda mi tumba, esa frustración ante la injusticia social me permitió seguir respirando, así deambule, ocupe un espacio, consumí aire y alimento, camine sin camino, sin dirección.
Tras cinco años acepte mi muerte como persona y asistí a un velorio solitario, logre entender que entre los jodidos y explotados yo había elegido ser verdugo de mi clase y que la única forma de alcanzar el sueño de subir en la escala social era aceptar el dulce encantó de la burguesía y prostituir mi humanidad, convertirme en el esclavo que defendía al amo.
Diez años me sentí en una tumba, con cada acción me hundía, era menos humano, menos libre, amar perdió sentido pensar en tener hijos me parecía la peor pesadilla posible y me preguntaba volteando la mirada hacia mis años de servicios; ¿Qué he aportado para la sociedad, podré pararme frente a mi hijo y con honestidad sentirme un ejemplo de padre? La idea me era repulsiva, que clase de hijo podría entregarle a la sociedad, una enorme tristeza me arropaba, y solo me acompañaba una escalofriante sensación del frío vacío de mi alma, de la ausencia de humanidad cada vez más grande.
Veo como deseas ser temido, enriquecerte, subir en la escala social, veo en ti la misma mirada miope con la que ignore la realidad que me rodeaba, veo ojos vampiros deseosos de sangre, de hacer algo ante la injusticia social, ante la corrupción, ante el abuso y se que no ves que mientras el sistema no cambie, no cambiara nada más y si diriges tus acciones por mi camino inmoral y falto de ética, te desperdiciaras, todo seguirá igual y de ti quedara menos que piltrafa humana, incapaz del amor propio, de ese egoísta, ¿estas dispuesto a morir en vida? Tienes hoy una oportunidad invaluable, tienes la posibilidad de hacer de la policía algo hermoso, “tienes la oportunidad que hubiese querido tener”, pero huelo el miedo en tus palabras, y la ignorancia en tus ideas. Y ya que soy incapaz de ser tan hipócritca como para ver a los ojos a mis hijos, pero tengo la oportunidad de que al menos me leas, la aprovecho para confesarme, con un colega pero
no un igual, lo hago con la esperanza de que en unos años seas tu quien en mi ausencia garantices la estabilidad y la paz de la sociedad en la que los míos y los tuyos vivan, la fortaleza y la paciencia necesaria para ser mejor que yo, ya la tienes, tienes las leyes, el valor eso lo quienes que construir con solidaridad y sin ignorancia, pero sobre todo con amor a la tierra, que es lo único que tenemos para los que vienen, se que no nos fallaras.
Att: un compañero de armas.

Nota: tal vez seas la primera persona que me conozca en realidad

Comentarios & Opiniones

Téura

A ver si no nos falla..

Buena carta

Critica: 
Lorena Rioseco Palacios

Muy interesante tu relato y tu estilo me encanto,todas las estrellas y un fraternal abrazo!!

Critica: 
JINN

Relato? El título habla de confesión. Pero gracias a dos voces que me decían te amo superé esa etapa oscura

Critica: 
JINN

Mas preciso imposible estimada Lorena

Critica: 
Vanessa Tawer

El"Poder" tiene "Instituciones Maquilladas", la "guerra es permanente".Cordial saludo

Critica: 
Argentina

Abrir el alma, confesarse y poder salir de las fauces de la oscuridad gracias a la fuerza del amor ya es la gloria ganada. Que bello escribes, me gustó ésta encuentro con la lírica y el lirismo de su autor. Gracias por éste abordaje a tus letras.

Critica: 
JINN

Gracias Giann, solo veo en esta pagina un espacio para compartir mis emociones, descargarme un poco, y como perro callejero recuperarme y lamer mis heridas

Critica: 
Argentina

Las heridas provocadas nadie mejor que uno mismo para sanarlas mi estimado Jinn. Gracias por su respuesta que me mantiene ajena de los hechos.

Critica: 
JINN

Así es mejor

Critica: 
Ananda (no verificado)

Estás vivo.

Critica: 

Comenta & Vota