AL DESPERTAR

La vida es una sola desconcertante
Y hermosa tal vez, pero solo tú eres
el protagonista de tu propio destino,
me dijo el oráculo del buen vecino.

Enjaulada en este ambiente de tristezas
y alegrías rodeada de uniformes blancos,
estetoscopio y recetas médicas diagnósticos
Condenándote al más vil de los virus.

Postrada en una cama ves como la oscuridad
cubre tu habitación, entre agujas punzantes
llenas de dolor, madrugadas infernales pasando
noches toledanas de penumbras y agonías.

Su corazón quiere dejar de latir,
su cuerpo débil y agotado ya no puede
resistir, su cabello que se movía con la brisa
del viento va cayendo lentamente cubierto
con un pañuelo que resalta su mirada
y desnuda su alma enamorada .

Penumbras y agonías a cada minuto del día,
llantos desconsolados, gritos desesperados,
en el pasillo del hospital sus corazones quieren
dejar de latir y su cuerpo pálido como un
papel que en cualquier momento deja de existir.

Despertares de silencios profundos inexplicables
vacío siente hoy tu alma con ansias
de un mundo nuevo lleno de esperanza.