La máscara

Es tan perfecto el velo que me cubre que ni la más familiarizada de mis amigas puede vislumbrar detrás de él : ese dolor que prolifera, las lágrimas que se filtran,
la ausencia que lastima, la dominante soledad , la herida que desangra, el martirio de la ingratitud,
la sonrisa fingida que ondea entre mis labios, y disimula perfectamente el llanto agazapado entre las tinieblas del alma.
Exhibo sólo eso que los demás quieren ver y, la máscara, cada día se torna más enérgica que la propia realidad… es absurdo porque, aunque los ojos pueden apreciarse, nadie es capaz de explorar en sus profundidades para descubrir el auténtico aspecto de mi corazón. Él, se encuentra aprisionado entre las garras amenazantes del miedo y la desolación, y de esa falsa felicidad que me inventé para engañar a los demás, pero sin poder mentirme a mí misma.
Nunca supe bien lo que anhelaba, he vivido compenetrada de confusiones y dudas, de sueños absurdos que simplemente fueron eso, sueños quiméricos que golpearon vigorosamente mis sentidos hasta ponerlos de bruces en el suelo…
Quiero ayudarme, deseo librarme de este ahogo que, me mantiene encarcelada en lo más insondable de la obscuridad, quiero ser desenmascarada para poder gritar que hay una llaga abierta que no cicatriza, que ciertas actitudes de los seres que amas te envuelven en perplejas vacilaciones y aflicciones, que te hacen cuestionar si has dado lo suficiente o, si has dado tanto que te olvidaste de ti misma.
No sé qué idear, ni en que creer, no puedo discernir coherentemente, no encuentro el letrero de salida y cada día me pierdo un poco más en este laberinto de añoranzas …
Sé que hay muchos que me quieren y ellos, conocen el caudal de ternura y amor que puedo brindar , más , esos pocos que me hieren, tienen el poder de blandir su lanza hasta el fondo de mis sentimientos, desgarrándolos sin piedad , sin reparar que la misma sangre circula por nuestras venas.
¡¿ Por qué no aprendo a ser feliz?!, ¡¿Por qué no aprendo a dejarle mis cargas a Dios?!...Hoy sólo sé que dependo de estos escritos, son como un oxígeno liberador de confesión, confidencias que pueden o no ser comprendidas, pero si serán leídas , y ustedes, mis amigos virtuales , sin haberme visto jamás, hoy podrán percibir detrás de la máscara, a esta mujer auténtica y real.