Libro con sus páginas vacías

En el reencuentro con mi vida, encontré un camino en el cual todo paso importante compartía con ese sueño que en algún momento pensé.
No fueron palabras vacías, solo fueron miedos encontrados sobre un laberinto de dudas y momentos.
La historia llego a formar parte de esos sentimientos que no solo fueron base de lo que quizás un día soy o fui.
En un camino de tristeza y soledad recorrí hasta que cree en mí una ilusión de la persona que quiera para mí.
Reímos. Jugamos, vivimos. Fuimos lo que en el mundo hoy poco se ve, momentos en los cuales las sensaciones nos hicieron ser no solo amigos, no solo confidentes sino fieles creyentes de un momento donde la vida encontró ese motivo para querer ser algo más.
Te pensé tantas veces que el recuerdo de ese sentimiento no solo creció sino llego a convivir en mi ser, en mi motivo, en mi yo.
Momentos felices se acercaron en esta historia donde las sonrisas y la pación desbordo cada uno de esos motivos para luchar y creer en que el mundo era mejor porque tú lo hacías mágico.
Llego esa emoción donde el mundo transcurrió y cada segundo del tiempo formo esa alegría en mi interior en recordar que, aunque los momentos fueran eternos esa sensación iría poco a poco desapareciendo.
Entendí en mi realidad en este libro que no puedo llenar, en esa ansiedad que el mundo podría entregar, pero hoy tú ilusión acaba de decir adiós.
De volar hacia ese recuerdo donde no existe una vuelta atrás, donde mi vida ya cambio, donde ya no vivo de ilusiones y creare una realidad donde no viva de tu recuerdo, pero si viva del espíritu de volar de extender las alas y crecer aún más.
Aquí concluye el vacío de recordar momentos que ya no quiero enfrentar y donde hoy tu recuerdo solo me dejo de importar.
Que la luz del momento siempre cree esperanzas y que cada motivo sea ideal para expresar que cada persona es importante en el momento ideal. Pero aún más importante es sentir paz y tranquilidad donde quieras estés y sobre todo Créete merecedor del amor que golpee tú puerta.

Cerramos este libro para construir historias donde no miremos a personas como el proceso, miremos a personas como nuestro proceso de construir nuevas historias.
El tiempo no es fracaso, el tiempo es aprendizaje.