A Frida Calderón

Muy cansado en mi cama yo yacía
y mil cosas girando en mi cabeza,
pero algo recordé no sin certeza
versos prometí que te compondría.

Cogí el papel que en mi mesa tenía
y un bolígrafo de mi cartuchera,
sin tu inspiración creo yo no hubiera
logrado escribir cuanto me urgía.

Frida es para mí un notable nombre
y Calderón el más noble apellido,
bondad, dulzura y gracia vos escondes

y otros dones también he percibido,
nunca me hagas sufrir ni me abandones
en este fango de dolor y olvido.