Cuéntalo

Cuéntalo, grítalo, lucha por ti
y por el resto de lágrimas silenciadas,
pensar que la vida es un regalo,
y que este contenga una putrefacta historia,
es sin duda la prueba más dolorosa,
de que ser feliz no es más que una utopía muerta.

Cuéntalo, porque mejor contar y huir,
que contar otro cadáver que se perdió,
en la memoria de una familia y amigos,
que desde entonces, no disfrutan de los atardeceres.

Yo sí te creo, no es una cuestión de fe,
es más un grito de esperanza
con forma de resentimiento, por presenciar
algo tan vergonzante que te hace dudar de la humanidad.

El espanto de ser maltratada o maltratado por unas alimañas,
debe de ser un angustiosos sufrimiento,
que te hace olvidar el significado de una sonrisa.

Hoy gritamos no es no, por ti,
por tu abuela, por tu nieta,
por cada luchadora que baila
ante el quebranto de saber,
que esta noche puede ser
violada, mutilada y asesinada;
que ácido el puto cuento de hadas.

Que los golpes que recibieron,
sea una página perdida en la historia,
y que el alzamiento empodere
a una mujer libre y sin un pasado agonizante.

Tanta impotencia acumulada ha desatado
algo que no conoce el miedo,
hoy más que nunca la lucha
es más firme y valiente,
es visibilizada y narrada por las que lo sufren,
no por una manada de escorias,
cuyos únicos recuerdos,
deberían ser el sucio gris
de los barrotes de la celda
donde solo estarán unos putos pocos años de mierda.

Siento que mi grito en el papel
no es suficiente para saciar
esta horrible mezcla de dolor y furia.

Espero que el dolor de hoy,
sea la tierna sonrisa de mañana,
por los gritos de ayer,
que retumbaran para siempre.

Por favor, cuéntalo, cántalo, susúrralo, grítalo,
pero levántate fuerte e inquebrantable,
porque hay motivos por los que luchar,
hay una vida preciosa lista para morder,
existe una caricia sincera esperándote,
pero antes, cuéntalo,
hazlo por ti y por todas tus compañeras,
porque si tú te salvas hoy, todos ganamos.