Testigo de dos almas

poema de Jalei

Hundió la rosa en su carácter, milenario;
con un aspecto y actuar imponente;
siempre inevitable...

Allí va, con paso y distancia de realeza;
un canto exacto que no precisa de lo cerca...

La luz abraza su rastro,
el cielo, y un viento de norte,
justo allí se esparcen;
adornándole elegante, amante, sí amante,
sin duda secretos que caen; naden...

...Grabó su esencia en sí un recuerdo;
con sus ojos, con solo oírle, le extrañó, le pensó,
le soñamos...