Sueño real

poema de Gores Garlop

Eras un pensamiento
que se volvió sueño,
un sueño que se hizo realidad,
una realidad donde ahora despierto
con un corazón que estalla de felicidad,
bombeando tu nombre al palpitar.

Eres tú, mi niña, mi amor ideal,
la mujer que no paro de pensar,
que el destino puso en mi camino
para enseñarme la magia de amar.

Eres tú el motivo
que a mis días da sentido;
bastó el tono de tu voz
para pintar de colores mi interior.

Eres quien inspira estas letras,
la melodía, la palabra perfecta,
la prueba viva de un amor sincero,
la nueva escritura de mi universo entero.

Eres la persona que quiero,
la chica que tanto deseo,
quien alimenta mi pecho,
mi realidad, mis sentimientos,
mis sueños y pensamientos;
la mujer con la que anhelo
vivir cada momento…
hasta que el tiempo
nos enmarque en un final eterno.