Él

La realidad me golpea abruptamente, el tiempo ya fue, el viento me susurra tu nombre, tú ya no estas, te fuiste. En mi cabeza nadan los recuerdos, pienso... ¿En verdad quiero olvidarlos? ¿En verdad quiero superarte? El optimismo me indica a hacerlo, la amargura me invita a seguir viviendo de recuerdos. Mi mente, ya sin fuerza, aún busca el "porque" de esa enorme mentira, cuyo recuerdo me atormenta, me enferma, ese "Te amo", tan falso, tan insignificante.
Mi cuerpo, agotado, quiere soltarte, dejarte ir, mi mente sabe que puedo hacerlo, sin embargo, los recuerdos son la frontera entre el seguir adelante y el regresar al inicio, los recuerdos de tus mentiras son un muro que me impide dejar de pensar, de suponer, de hacerme preguntas cuyas respuestas no tengo, y que, tontamente, muy en el fondo, no quiero saber. Te imagino ahí, conmigo, hablando del universo. Pero no estas, estas en otro lugar, con alguien más. Mi mente viaja en el tiempo, cuyo pasatiempo favorito se remonta en el tiempo, el tiempo pasado. Veo mis errores, y me pesan, veo los detalles, y me parecen cosas fundamentales, veo tu risa, y tus ojos, no me quiero ir, me quiero quedar ahí. Despierto, sudando. Son las 3 de la mañana, el silencio es total, hace un contraste entre el sueño y la realidad, y me hace preguntar... ¿Cuál es la vida real? Mi mente asiente, señala el sueño como el real, mi consciente sabe que no es verdad, en el mundo real ya no estas, te fuiste. Una lágrima resbala por mis mejillas, los recuerdos están ahí, acechándome. Las preguntas vienen de nuevo, ¿Porque? ¿Cuando?, al cabo de segundos, mi mente se recupera, tú no estas mal, eres feliz, estas con él.
El, ¿el es mejor en cada aspecto? Seguramente asi es.
¿El se preocupa por ti? Mas le vale hacerlo, repiten mis labios de manera débil.
Eres ridículo, me repito a mi mismo. Mientras tú le escribes esta lluviosa madrugada, ella esta bien, es feliz, tal y como tú quieres. ¿Porque te haces esto? Porque me importa. Me repito de nuevo, una y otra vez.
El dia se torna largo, ya no pienso mucho en ti, pero inconscientemente ahí estas, en mis pensamientos. Te imagino, deseando que hubieras sido sincera conmigo, mirándome de frente, y matándome en vida con un "Ya no te amo" o "Me gusta alguien más". Pero la imaginación eso es, imaginación.
Me gustaría pedirle a él, sin odio y con respeto, que te cuide, que te haga feliz, quisiera poder hablar con él y pedirle que sea lo que yo no pude ser. Que sea el quien saque esas sonrisas que tanto me encantaban, que mas le valga al desgraciado darte los buenos dias y las buenas noches siempre, que te conteste rápido, que sea detallista, que te ame, que te abraze. Al final yo le daré la mano, y le diré al oido: "Cuídala, como yo no supe hacerlo, pues esta mujer es especial, ella marcó un antes y después en mi vida, y merece lo mejor". Luego volteare a verte, agacharé la cabeza y me iré, con una lágrima entre mis mejillas, pero con una sonrisa en el rostro, pues se que él te hará feliz, cosa que yo no supe hacer. Ve con él, seguramente el es atractivo, detallista, te escribe, te entiende, es músculoso. Podrá decirte palabras bonitas, pero eso no importa, al menos no importaran, hasta que sepas que son sinceras, ese dia, podrás decir que te ama. Pero no te confundas, ni el ni nadie jamas te amaran como te amé yo, tal vez su amor es sincero, pero no mas que el mío. Tal vez el ya hizo que me olvidaras, pero recuerda, los recuerdos son mi debilidad, no se van, están siempre, no se van nunca.
(I)