Dotes.
Tú, piel canela
Que con el roce de tu cuerpo al mío
Haces temblar y estremecer
Hasta el último poro de mi cuerpo
Con tus ojos color miel
Que brillan al final de la sala
Como dos grandes farolas
Bellas
Incandescentes
Tu cabello ondulado
Que atrapa mis dedos
Como una red
Como una trampa en la cual
Soy feliz de volver a caer
Esa sonrisa
Tan sutilmente hermosa
Que deja escapar de entre
Esos hermosos labios
Suaves y sinceros “Te quiero’’
Le das vida a mis raíces muertas
Calmas la sed de este
Corazón deshidratado
Con esa dulzura en tu ser
Que empalaga mi corazón
Mi alma
Que sirve de calmante
A las recurrentes tardes
Negras y amargas
Hoy mi lápiz
Hace tiritar mi piel
Le susurra versos inquietos
Románticos hasta la medula
Versos tuyos, amor mío
No sé si me quieras en este instante
Pero como te quiero
Desde lo más profundo
De esta alma incesante
Comentarios & Opiniones
Precioso poema Marichales, te felicito pues te inspiras muy bien en una exposición excelente. Te saludo cordialmente poeta.
Muchas gracias por tomarte el tiempo de leer mis lineas. Y gracias por tu comentario. Un saludo Jose.