Un loco.
poema de Erasmo
Yo me confieso demente,
pues así dice la gente,
y también soy un orate,
con pretensiones de vate.
Yo me confieso demente,
un tornillo se salió,
pero a mi no me valió,
ni un padrenuestro vehemente.
Yo me confieso un loco,
ya no prende un sólo foco,
soy bailarín de las sombras,
al difamarme me nombras.
Yo me confieso un loco,
todo lo noble lo desenfoco,
y lo transformo en deforme,
nube que en la fila forme
de los que quieran golpearme,
por raro y tonto,
por vago y torpe,
hasta que puedan saciarme.
Soy el dislate de lo perimido,
soy el limón exprimido.
Comentarios & Opiniones
Dicen que cuerdo es quien puede fingir cordura, y que quien no haga nunca una locura, no hará nunca nada interesante. Un abrazo.
Gracias Ángel por estar aquí. Un abrazo.