La época de los infelices

La época de los infelices

La realidad abruma,
El pulmón destemplado fuma,
La sociedad duerme en la cuna
A quien con engaños tortura.

Corazones fríos y solitarios,
Se observan casi a diario,
La ansiedad de no tener pareja,
O de algún día perderla.

El amor es ahora un idilio,
Acaba antes de estar perdido,
Se desenvuelve en latidos,
Y termina todo descolorido.

La chica solitaria que espera,
Al príncipe que ve en novelas,
Con una belleza y caballerismo sin igual,
Que en "ningún" hombre se puede encontrar.

O el tonto que no se deja
Amar y vive en penas,
Se desvive por caricias,
Pero al despertar el vacío lo hipnotiza.

Es lo popular en esta realidad,
Que no se deja acomodar,
La felicidad ya no es moda,
Hoy importa el sexo y las drogas.

O los estándares sociales,
Que no son ningunas realidades,
La humildad y el cariño,
Son más importantes que la ilusión de los niños.

Existen personas anhelando amor,
Pero buscan en lugares equivocados o de diversión,
Desesperados por sentir,
Entregan lo más preciado a cualquiera que sepa mentir.

Por eso, es mejor detenerse un momento,
Y sólo dejarse llevar, contemplar en silencio,
Conocer a la persona indicada,
No es tan difícil cuando te relajas.