Amo y esclavo

Frente al limite del abismo eterno
escuchas el silencio infinito
de lo absoluto. Miras en el cielo
tenues colores, donde ha dejado
de descansar el consuelo olvidado
de aquellas almas aladas que viajan
al paraíso (hoy temiblemente
perdido) o a lo profundo del infierno.
Todos tus recuerdos y anhelos queridos
el Amo de tu triste destino
ha desvanecido en su impiadosa
cárcel de amoríos. Sentís en tu
blanca carne el oscuro sometimiento
del terrible amor sin sentidos, la
esclavitud de tu alma invadida
por el miedo ingenuo a lo desconocido.
Fue otra simple relación de poderío,
el secreto mejor guardado
de dos personas enamoradas
en la unión desigual de los amantes.

Negros pasos en la silenciosa noche
se mojan con la espuma del ancho mar,
recuerdos imposibles de olvidar.
Pero ahora tu frió rostro golpea
contra la helada brisa más allá
del bien y del mal. Y la belleza
de tu rostro apunto de acabar.