Idea

poema de San Brendano

Mis ojos vidriosos conservan el aliento enamorado de un animal salvaje
Jugando con las rejas encarceladas que dañan mi espíritu terriblemente anonadado por el silencio.
Estoy yo, pérdida, vagabundeando, en la infinita caminata que acuareliza una bailarina en su extensión.
Las cenizas del día después nos traerán su bendición para mi eterno descanso sobre la tierra colorada.
Veo ángeles de un millar de tonos azules y de líneas incandescentes, son tantos que mis lagrimas no alcanzan a retomar sus dedos para salvarme de esta dura realidad donde vivo.
¿Acaso tú ves lo que mis suspiros tratan de contar en milésimas vueltas de teclas negras y semicorcheas?
El piano vuelve a ser mi objeto principal
El agujero con el vértice donde un circo espectacular se gesticula alrededor de una mujer transformada.
Y la bailarina retorna en su más fidedigno labor. Baila para mí y su vestido no es otro que el de aquella princesa sin corona pero simplemente más que feliz, mía.

Comentarios & Opiniones

Silvia

Preciosas letras siempre !silvestre un placer...

Critica: 
Dan's Poetry

Me impresiona su bella poesía, una narración de tan fiel desdicha... saludos!

Critica: 
María Cruz Pérez Moreno -acnamalas-

Gran placer Silvestre volver a leer tus excelentes escritos, gracias. Buen día.

Critica: 
YY. Arronis

Muy bello poema cuantos corazones se ven reflejados en tus letras el talento del poeta es expresar con magia lo que otros solo viven y callan. Todas mis estrellas.

Critica: 
La Dama Azul

¡Exquisito! Una introspectiva armoniosa, real, legítima. Guardo tan selecta obra en mi baúl.
Recibe mi reconocimiento y saludos.

Critica: 
La Dama Azul

"Veo ángeles de un millar de tonos azules
y de líneas incandescentes,
son tantos que mis lágrimas
no alcanzan a retomar sus dedos para salvarme
de esta dura realidad donde vivo."

Critica: